El jefe de la División de Salud de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Mark Pearson, se refirió este mediodía, invitado por Isapres de Chile, a los aumentos de los costos de enfermar en los países de la OCDE y señaló que Chile ha venido mejorando su sistema de salud y aumentando su gasto en esta materia, aun así, el experto en salud remarcó que a Chile todavía le queda largo camino por recorrer si quiere situarse a la cabeza de los países pertenecientes a la OCDE.
El jefe de la División de Salud explicó que, según los últimos datos actualizados, Chile registra cifras optimistas: la expectativa de vida sigue aumentando, así como el gasto en salud y, por otra parte, la mortalidad infantil y la mortalidad en algunas de las enfermedades más comunes, como las cardiacas, disminuye de forma progresiva.
Pero el experto en salud de la OCDE subrayó que hay datos que muestran cifras no tan positivas respecto a Chile. En este sentido, Pearson detalló que un cuarto de los adultos chilenos padecen de obesidad, frente al 16% de media registrado en los países de la OCDE. También recalcó que el 10% de la población adulta chilena padece de diabetes, cuando la media de la OCDE se sitúa en el 7%.
Otro de los problemas de salud que Pearson consideró que enfrenta Chile es el tabaquismo, al respecto, el experto apuntó que el 30% de los adultos chilenos fuman, una cifra sólo superada por Grecia y Rusia. La alta mortalidad en accidentes de tráfico es otro de los desafíos que afronta Chile, según indicó Pearson, ya que en Chile cuenta con el doble de posibilidades de morir en un accidente de tránsito que la media de países de la OCDE, sólo superado por México.
En cuanto al gasto de salud, el último informe de la OCDE mostró que Chile invierte únicamente el 7% del Producto Interior Bruto en salud, mientras que la media en la OCDE se sitúa en el 9,4%. En este sentido, Pearson enfatizó que, del gasto total, el 45% pertenece al sector público mientras que un tercio se obtiene de gastos directos en efectivo por la ciudadanía. Esto refleja, en palabras de Pearson, problemas de inequidad, de acceso al servicio de salud y de falta de calidad en la salud.
El jefe del área de salud de la OCDE reconoció que, aunque las cifras de Chile en cuanto a salud han ido mejorando de forma progresiva, el país necesita aumentar su gasto en salud, más aun teniendo en cuenta el crecimiento económico que vive el país en los últimos años.
En este sentido, como representante de la OCDE, Pearson propuso tres cambios para su consideración e implementación en Chile. En primer lugar, Chile debería fortalecer la fuerza de trabajo laboral del personal sanitario, sobre todo, médicos y enfermeros; la importación de personal es una medida que aconseja aplicar únicamente a corto plazo. En segundo lugar, Pearson estimó oportuno implantar un sistema de pago basado o orientado a los grupos relacionados con el diagnóstico (DRG, por sus siglas en inglés), como en algunos países europeos, sistema que ayude a mejorar la transparencia de los fondos públicos en esta área. En tercer lugar, Pearson apuntó a una mejora de la calidad en el servicio de salud. Al respecto, añadió que hay cifras en el informe de la OCDE que señalan que el cuidado primario no es el adecuado, algunos ejemplos aportados por el experto, el 11% de las personas que acuden al hospital por ataques cardiacos mueren en los días posteriores, mientras que en la OCDE la media se sitúa en el 8%.
Como apunte final, el jefe de salud de la OCDE recalcó que, dado su PIB, la salud en Chile es relativamente buena, quizá más de lo que se esperaría puesto que va 2 o 3 años por delante de las estimaciones de la OCDE. Aun así, Pearson enfatizó que Chile gasta en salud un tercio de lo que gasta Alemania, lo cual ejemplifica que Chile tiene desafíos pendientes que afrontar en los años venideros y, en este sentido, el experto en salud apuntó que Chile debe abordar con urgencia la obesidad, el tabaquismo y las muertes por accidentes de tráfico.